viernes, 22 de mayo de 2015
PARACHOKES
Esta historia comienza allá por finales de los ochenta cuando en Sevilla un muchacho llamado David Zapata, cantante y compositor, y un batería, de nombre Carlos Pérez, fundan una banda llamada Parachokes con el afán de hacer rock and roll, y doy fe de que lo consiguieron. En 1.990 lanzaron su disco debut, titulado con el nombre de la banda y producido por el músico sevillano Juanjo Pizarro, una muestra de cómo deberían de ser los primeros discos de todas las bandas, lascivo, macarra, guitarrero, urgente y con temas de calidad como "Vaqueros Nuevos", "Qué Coraje Da" o "Si Tú No Me Das Marcha". Tras este prometedor bautismo de fuego llegó en 1.992 el disco al que daremos mayor protagonismo, titulado "Provocar". Producido por el prestigioso Paco Trinidad y auspiciado por el sello EMI - Hispavox, "Provocar" sigue el camino abierto por "Parachokes" solo levemente modificado por la lógica evolución tras dos años tocando en directo, juntándose con bandas consagradas y unas condiciones de grabación superiores. Aún así, el estilo de rock chulesco y stoniano sigue muy presente, como demuestra el tema inicial "Ruido De Llaves", al que sigue el tema que da título al álbum, otra pieza guitarrera que bien podría haber formado parte del repertorio de Tequila, al igual que los míticos Burning podrían haber sido perfectamente los autores del medio tiempo canalla "Sin Amor", una canción que sabe a últimas horas de bar, donde los ardores del alcohol y el tabaco se unen a la quemazón de unos labios que añoran la saliva de los besos perdidos. La flema de "Sin Amor" se aparta para dejar paso a la energía de "Camino Despacio", un inicio a lo Thin Lizzy para una composición muy rockera con un estribillo acelerado y pegadizo. Igual de rockera es la, posiblemente, canción más conocida de Parachokes y primer single de "Provocar", "De Todo Un Poco", el personal "Simpathy For The Devil" de llegó incluso a sonar en los 40 Principales en una época en la que la radiofórmula era algo más abierta de mente que ahora. El siguiente tema, "Entre Rejas" es la canción más relajada del álbum, una pieza que suena a balada rockera y ochentera y que da pie a "Crónica Urbana" que, como su propio nombre indica, suena callejera y barriobajera, tanto musical como letrísticamente, ideal para pinchar en un guateque al que estuvieran invitados Keith Richards, Pepe Risi, Ramoncín (cuando molaba, claro) o Los Ilegales.
"Bajo Una Palmera" imprime un toque de relajo a ritmo de reggae, una pausa que se ve cortada por "Piérdete", otra muestra de ejercicio rockero y electricidad que destila optimismo y buen rollo. "Sueño Contigo" cierra el disco muy arriba y mostrando sin ambajes el origen de la banda, pues se trata de una canción con una fuerte influencia del rock andaluz.
Parachokes defendieron este disco en directo con una gira bastante extensa que, sin duda, tuvo su epicentro con el concierto en la Expo del 92 en su casa, en Sevilla, dos años después la banda se separaría sin que las razones quedaran muy claras, quizá el avance de otras músicas que en los noventa tuvieron más aceptación y orillaron al rock de factura más clásica en el olvido fuese el detonante, quizá no tuvieron la repercusión merecida debido a aquella estúpida comparación con Los Ronaldos debido a una supuesta semejanza entre las voces de David Zapata y Coque Malla, aunque Parachokes siempre adolecieron de los dejes pop hechos para la radio que se colaban en los discos de Ronaldos, quién sabe, el caso es que nos perdimos a un buen grupo.
En 2.011 se volvió a hablar de Parachokes ante la aparición de unas nuevas grabaciones caseras a cargo de David Zapata y unos cuantos conciertos que dio la banda con ciertos cambios en su formación.
Ignoro cuál será la situación de Parachokes en la actualidad, pero lo que sí sé es que estos dos primeros discos son de obligada escucha para todos los que amamos el rock sucio y callejero.
Aquí podéis escuchar y descargaros su música:
Parachokes
viernes, 15 de mayo de 2015
LA SOLEDAD DE LUCILLE
Cuando quemas tus momentos dedicados a la música a investigar y descubrir nuevas bandas y solistas te suele ocurrir una cosa, que te olvidas de prestarles atención a los que te han acompañado durante toda la vida, les buscas un rincón confortable y allí los abandonas hasta que algo te haga acordarte de ellos. Total, que entre tanto rock & roll, punk, hard rock, southern rock, etc. llevaba mucho sin escuchar al bueno de B.B. King, sabía de sus problemas de salud y me preocupaba, pero no imaginaba que se fuera a morir tan pronto y dejar el mundo de la música con esta sensación de orfandad.
Existe en el mundo de la cultura cierto tipo de carisma que alcanza a todo el mundo, da igual que sean fans o no, ves a cierto artista y te cae bien, quizá por su apariencia bonachona, por sus circunstancias personales por su atractivo físico o yo qué carajo sé, el caso es que B.B. lo tenía pero sería un error de bulto valorarle únicamente por eso, porque Riley Ben King era, es y será uno de los músicos más influyentes del siglo XX.
B.B, como tantos otros Bluesmen, nació en una plantación de algodón en las cercanías del Mississipi, abandonado por su padre y con una madre que no podía cuidar de él, el joven Riley creció junto a su abuela y tomó contacto con la música, como tantos otros artistas afroamericanos, cantando gospel en la iglesia, su primera guitarra le sería regalada por Bukka White, un músico local primo de su madre. Con los años B.B. compaginaría su trabajo como conductor de tractores con su perfeccionamiento como guitarrista, por fin, en una de sus frecuentes visitas a Memphis, consiguió sonar en una radio local, esta aparición radiofónica le consiguió muchos conciertos que le valieron de plataforma hacia un contrato discográfico con la prestigiosa RPM Records, allí, King conoció a personajes como el creador de Sun Records, Sam Phillips, o el bluesman T-Bone Walker. Sus grabaciones con RPM le granjearon fama en el mundo del R&B y le valieron para colaborar con grandes del movimiento como Ike Turner.
En los años sesenta, B.B. King cimentó su leyenda con un cambio de discográfica que le sirvió para sentar las bases de su sonido, más bluesero, y consiguió el éxito con temas como la archiconocida "The Thrill Is Gone". A partir de aquí, B.B, junto a otros como Muddy Waters, Chuck Berry o Buddy Guy, se convirtió en uno de los guitarristas más reputados e influyentes, contándose entre sus admiradores gente como Keith Richards, Eric Clapton, Jimmy Page, Pete Townsend, George Harrison, Gary Moore y otros más modernos como Slash, Richie Kotzen, The Edge, Richie Sambora, Jack White o Angus Young.
Cuentan que B.B. King comenzó a llamar a sus famosas Gibson Lucille debido a que se declaró un incendio en un teatro en el que acababa de tocar, King casi pierde la vida por rescatar a su guitarra, a la que bautizó con este nombre al conocer que dicho incendio fue provocado por dos hombres que peleaban por una mujer llamada precisamente Lucille.
Ahora las Lucille de B.B. King ven cómo el amor de su vida se va, cómo el que incedió teatros, salas y pabellones a su lado abandona esta vida de blues y electricidad, viudas de unos dedos que las acaricien de forma suave y vigorosa a la vez.
Que la tierra te sea leve, B.B. King.
B.B. King - The Thrill Is Gone
viernes, 8 de mayo de 2015
THE SATISFACTORS
¡Ah, el encanto de lo vulgar!. Sería muy fácil para mí haber convertido este blog en una sucesión de posts dedicados al mainstream mucho más digeribles para los lectores, hablar únicamente de Stones, AC/DC, Sex Pistols, etc. pero quien escribe esto cree que las verdaderas esencias y la salud del rock & roll se encuentran en su underground y es por eso que la Nicotina Eléctrica está en su mayoría dedicada a grupos de repercusión moderada, solo se les pide que se amolden a las dos reglas básicas del rock & roll: Divertir y pervertir.
Perversión y diversión las contiene a raudales el disco homónimo que constituye el debut de los Satisfactors (¡Vaya nombre, "Satisfaction" y The Dictators juntos, ¡wow!!) , un supergrupo formado por el vocalista Bruce Ferguson, de The Easy Outs, el guitarra de The Doughboys, Gar Francis, Kurt Reil, de The Grip Weeds a la batería y el prestigioso Kenny Aaronson, ex Joan Jett, Billy Idol, Michael Monroe, Bob Dylan, Brian Setzer o New York Dolls al bajo. Estos cuatro músicos han parido un debut que evoca los buenos viejos tiempos del rock proveniente de Nueva York, mucho CBGB y los Stones acompañando como referencia (no en vano, el bueno de Marty Scorsese siempre ha manifestado que Richards, Jagger y sus chicos son para él la gran banda neoyorquina aunque provengan de Londres y es muy obvio que la influencia capital de New York Dolls y Johnny Thunders son los más grandes).
El LP se abre con una canción híper rockera de influencia ramoniana titulada "She's Got Charm", la influencia stoniana se abre con "I Love Girls", un riff muy marcado con estribilllos muy a lo californiano. Gar Francis impone su ley en "You're O Crazy", una canción que evoca irremediablemente a The Doughboys y su influencia Rolling Stones. "Hey Mama" es un medio tiempo chulesco muy a lo Johnny Thunders en "So Alone", la siguiente pieza, "Sweet Sunshine" exuda influencias setenteras y se me vienen a la cabeza nombres como KISS o The Dictators cuando aparece a toda hostia "Johnny Commando", un furioso y guitarrero homenaje a Johnny Ramone. Tanta adrenalina exige un descanso, este llega con "Takes Your Troubles Away", una semibalada con ecos del Bowie más "Ziggy Stardust". El descanso termina y un riff heredero de Chuck Berry y Keith Richards nos introduce "Hit Me, Hit Me, Hit Me", otro trallazo al que sigue "Gimme Rock N'Roll", otra poderosa pieza rockera en el que se dan la mano New York Dolls con Alice Cooper y una letra que homenajea a los cuatro Ramones originales. "My Girl Just Want To Dance" tiene un punto canalla y pícaro muy a lo Mink DeVille, despuésencaramos "My Baby Got It", de aires country y sabor a carretera. Todo lo bueno tiene que acabar y este "Satisfactors" lo hace con "Had It With You", otra pieza de ese rock macarra y vacilón que pusieron de moda bandas los cuatro de Queens o los chicos de "Handsome Dick" Manitoba.
Suciedad, electricidad y buenas canciones.
The Satisfactors - Johnny Commando
viernes, 1 de mayo de 2015
LA MIRADA SUCIA
Dirty Eyes son cuatro tipos de Los Ángeles que se juntaron en 2006 a fin de conformar una banda en la que dar rienda suelta a sus influencias, enseguida comenzaron a fraguarse un nombre merced a sus directos salvajes y, poco a poco, llegaron a telonear a nombres tan grandes como Mike Watt, Eddie & The Hot Rods, Richmond Sluts o Lords of Altamont. En 2011 por fin entrarían a un estudio a grabar su debut discográfico y así vería la luz este "Deadbeat Blues", un disco potente, enérgico y sucio del que podemos rescatar influencias como Chuck Berry, Dead Boys, NY Dolls, Ramones o The Joneses. Así, en "Deadbeat Blues" podemos encontrar punk rock & roll enfermizo y salvaje al estilo Dolls o Johnny Thunders como "Ain't Nothin' To Do", "Takin' A Dive", "Two Timin' Bitch" o la guitarrera y canalla revisión del "Sufragette City" de Bowie, canciones mucho más emparentadas con el rock pionero de Chuck Berry o Eddie Cochran, el tema queda título al álbum, "Skin Of Yer Teeth", "Self-Destructed Blues" o el furioso y bluesero boogie "Yellow Fever", con Patrick French (ex-Joneses) a la armónica. La potencia melódica ramoniana se une a la fiesta en "So Pretty" y, en mi opinión, la mejor canción del disco, "Revolution Rock", sucia y macarra. Todo muy bien cocinado sónicamente y pulido por la voz de Donny Cox y su forma de cantar, muy punk.
El que persiga un disco que le cambie la vida que busque en otro sitio, el que goce con los sonidos crudos y gamberros, aquí puede escuchar y descargar gratuitamente las canciones de Dirty Eyes:
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